Categoría: excursiones

Las mejores excursiones por los pueblos de Madrid, en especial, por la sierra de Guadarrama. Rutas por los lugares más atractivos y frecuentados y por aquellos rincones menos conocidos

Cascada de la Dehesa de Navalcarbón

La Dehesa de Navalcarbón, un paraje repleto de senderos y espacios recreativos próximo a Madrid

La Dehesa de Navalcarbón es un pulmón de oxígeno que se encuentra muy próximo Madrid, a poco más de 20 km. Este espacio natural, repleto de pinos y matorrales, con múltiples senderos, un atractivo río y zona recreativa, con columpios y mesas para hacer un picnic, constituye un lugar ideal para pasear durante unas horas, correr, montar en bici o pasar un bonito día de campo.

Panorámica del embalse de Los Arroyos

Ruta circular por el embalse de Los Arroyos, en el Escorial, donde se permite la pesca

Los caminos del embalse de Los Arroyos conectan con El Escorial, Galapagar, Collado Villalba, Colmenarejo y Valdemorillo. Está muy frecuentado por senderistas, ciclistas y amantes de la pesca. La ruta circular es un terreno apto tanto para mayores como para niños, en un encantador entorno natural.

Puente de estilo romano de El Escorial

Rutas desde el puente romano de El Escorial, por la La Herrería hasta Zarzalejo

Las rutas que se inician en el puente romano de El Escorial son muy frecuentadas, debido a su comodidad, a su atractivo paisaje, con el Monasterio de El Escorial de fondo, y a su diversidad de caminos. La amplitud de sus espacios, su tranquilidad y sus rocas graníticas hacen de este lugar plagado de retama un sitio ideal para pasar el día con niños, haciendo un picnic si es oportuno. Es una excursión que se puede hacer andando, en bici e incluso a caballo.

El bosque encantado, un jardín botánico que es una auténtica obra de arte topiario en la Sierra de Madrid

El bosque encantado impacta por su belleza y magia. Situado en San Martín de Valdeiglesias, este parque sorprende al visitante, como si se tratara de un oasis en medio del desierto, que bien podía estar hecho por el emblemático Eduardo Manostijeras. Sus paseos, sus jardines decorados con esculturas vegetales, y su acogedor ambiente hacen de este bosque una verdadera obra de arte topiario. Hay entradas especiales que permiten acceso al parque durante todo un año.