Recomendaciones para no sufrir dolores de cabeza en los viajes

Evitar el exceso de bebidas alcohólicas y hacer pequeños ejercicios durante el viaje reduce la aparición del dolor de cabeza. El estrés, la alteración del ritmo de sueño y horarios de comida durante los viajes actúan negativamente sobre la salud, pudiendo llegar a cronificar la cefalea. Los cambios de altitud durante el despegue o aterrizaje pueden desencadenar en el viajante un dolor muy intenso y de duración corta, similar a la cefalea en racimos.

Cada año crece el número de consultas por cefaleas relacionadas con los viajes entre los especialistas. Los viajes, más allá de una obligación o un reducto de placer, pueden suponer un problema de salud para el viajero, que ve agravado el dolor de cabeza por culpa de los desplazamientos.

Además, factores como el estrés y constantes cambios de horarios a los que se ven sometidos los viajantes contribuyen a padecer dolores de cabeza.

Aunque el arsenal terapéutico disponible en la actualidad permite en más del 90% de los casos que los afectados mejoren su calidad de vida, las personas migrañosas se muestran más vulnerables ante estos síntomas y, por ello, deben evitar exponerse a situaciones de estrés y ajustarse a las horas de comida.

Cuadros de ansiedad a la hora de salir de viaje

En muchas ocasiones, el simple hecho de tener que preparar la maleta a última hora o el miedo a no despertarse a tiempo genera cuadros de ansiedad, lo que se traduce en el temido dolor de cabeza. Por ello, se recomienda, siempre y cuando sea viable, preparar con antelación el viaje. La sensación de control bloqueará la aparición del estrés y, por lo tanto, permitirá disfrutar de un viaje con la cabeza despejada.

Asimismo, el organismo se resiente de las constantes alteraciones en el ritmo de sueño y horarios de comida. Estos cambios pueden despertar en los viajeros una cefalea tensional, caracterizada por un dolor sordo, constante y opresivo localizado a ambos lados de la cabeza.

“En algunos casos, la melatonina puede resultar eficaz para solucionar estos trastornos y mejorar la calidad del sueño, aunque aún no se ha demostrado científicamente la eficacia del tratamiento”, puntualiza el Dr. Láinez, Jefe de Servicio de Neurología del Hospital Clínico de Valencia y Responsable de la Campaña de Sensibilización en Cefaleas de la OMS.

Los viajes en avión provocan dolores de cabeza

Los viajes en avión propician dolores de cabeza similares a la cefalea en racimos motivados, en su mayoría, por los cambios de altitud durante el despegue o aterrizaje. Se trata de un dolor intenso, no pulsátil, que tiende a repetirse en la misma zona de la cabeza o de la cara en cada ocasión. “Son más frecuentes en personas que presentan, en el momento del viaje, problemas catarrales”, explica el Dr. Láinez.

En este grupo, el dolor se localiza de forma intensa en la parte inferior de la cabeza y los oídos. Por ello, conviene equiparse de algún descongestionante que actúe sobre las vías respiratorias y alivie estos síntomas. Este tipo de cefalea, poco conocida entre los viajeros, motiva buena parte de las consultas al especialista. “No tiene por qué suponer un problema y cronificarse”, puntualiza el Dr. Láinez. En cualquier caso, son este conjunto de trastornos, y no los viajes en sí, los que pueden ocasionar cefaleas crónicas.

Recomendaciones para evitar los dolores de cabeza en viajes

El dolor de cabeza puede convertirse en un insufrible compañero de viaje si no se tienen en cuenta unas sencillas recomendaciones. A la hora de preparar la maleta es importante no olvidar introducir medicamentos sobre todo en aquellos viajeros que padecen de forma recurrente dolores de cabeza.

“Las crisis pueden surgir en cualquier momento y, en muchas ocasiones, puede resultar complicado hacernos con la medicación en el lugar de destino”, explica el Dr. Láinez. Por ello, es importante aprovisionarse de suficiente medicación para la estancia y, en casos de catarro, no olvidar llevar en el equipaje de mano un descongestionante.

Por otro lado, se recomienda ingerir regularmente agua y otras bebidas azucaradas pero exentas de gas y evitar viajar en ayunas. “En contra de lo que la mayor parte de la gente piensa”, comenta el Dr. Láinez, “no comer favorece la aparición de dolores de cabeza”. En cualquier caso, conviene evitar el consumo excesivo de bebidas alcohólicas.

Las contracturas musculares pueden derivar en dolor de cabeza

Las contracturas musculares, en su mayoría motivadas por una mala postura, pueden derivar en dolores de cabeza. Conviene prestar especial atención a la cabeza y evitar que permanezca en una mala posición, lo que forzaría los músculos del cuello y produciría dolor de cabeza.
Además, la práctica de ejercicios musculares es una buena manera de prevenir o aliviar las molestias musculares. Los viajes en tren y avión ofrecen la posibilidad de estirar las piernas y practicar estiramientos más completos para evitar sufrir contracturas musculares.

En algunos viajes espaciales se han descrito fenómenos visuales similares a los que ocurren durante la migraña. “Las grandes alturas pueden provocar alteraciones en el cerebro similares a las que ocurren durante la migraña”, concluye el doctor Láinez.

 Fecha de edición del texto: 22 de noviembre de 2006