Cáncer de mama y osteoporosis tras la menopausia

La probabilidad de que una mujer española desarrolle cáncer de mama antes de cumplir los 75 años es del 5%, es decir, una de cada 20 mujeres desarrollará cáncer de mama antes de esa edad. Además, se estima que, en España, el 78% de los casos de cáncer de mama se da en mujeres postmenopáusicas.

La enfermedad cardiovascular, el cáncer de mama y la osteoporosis son las enfermedades más frecuentes asociadas a la menopausia. Así, en el 85% de las mujeres españolas el deterioro en su calidad de vida por la llegada de esta nueva etapa está ligado a la aparición de estas patologías.

Aunque la patología más frecuente tras la menopausia es la enfermedad cardiovascular, seguida de la osteoporosis y el cáncer de mama, esta última es la que más preocupa a la mujer menopáusica en España.

Ante el aumento de la esperanza de vida en España, que se estima que en el año de 2020 llegará a los 85,1 años y la búsqueda de una mejor calidad de vida en la mujer madura, los expertos en Ginecología se plantean en la actualidad la necesidad de elaborar un programa individual de revisiones, posibles tratamientos y hábitos de vida saludables para cada mujer y en colaboración con ella una vez analizados los factores de riesgo, siempre teniendo en cuenta su calidad de vida.

Concienciar para la medicina preventiva

Estos han sido fundamentalmente los temas a tratar en el II Curso para Residentes en Ginecología de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM), celebrado en Sitges, entre cuyos objetivos, según el profesor Javier Ferrer, presidente de la AEEM, destaca el de “formar a los residentes y concienciarles sobre la necesidad de aplicar y utilizar la medicina preventiva, algo fundamental en la atención a la mujer antes y después de la menopausia, con el fin de evitar o retrasar la aparición de enfermedades relacionadas con la menopausia y el envejecimiento”.

Este experto añade que es fundamental que el ginecólogo identifique qué pacientes van a tener mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama. Así, hay un grupo de pacientes que, bien por sus antecedentes familiares, el número de biopsias que se le hayan realizado anteriormente, porque haya estado expuesta a alguna radiación o tenga una enfermedad preneoplásica en la mama, son susceptibles de realizar un tratamiento farmacológico preventivo.

Un 40% de pronósticos desfavorables de cáncer de mama

Según Ferrer, “entre un 35% y un 45% de los casos de cáncer de mama en nuestro país tienen un pronóstico desfavorable en el momento del diagnóstico, bien porque la detección se realiza cuando la enfermedad está avanzada o por la edad a la que se ha detectado”.

El pronóstico de todos los tipos de cáncer depende, en gran parte, de un diagnóstico y tratamiento tempranos. Para ello, el profesor Ferrer destaca la exploración ginecológica como herramienta fundamental de detección. “Además contamos con gran número de métodos de diagnóstico dependiendo del tipo de cáncer: mamografía en cáncer de mama, la ecografía en el cáncer de endometrio y de ovario, la citología y biopsia en el cáncer de cérvix”.

Menopausia y problemas de salud

El doctor Miguel Ángel Checa, médico adjunto al Servicio de Ginecología del Hospital del Mar de Barcelona, explica que “cuando una mujer comienza a tener desarreglos menstruales debe continuar con las medidas dietético-higiénicas recomendables para cualquier otra persona o adoptarlos si no los tenía anteriormente, puesto que es lo que mayor evidencia de prevención ha demostrado”.

Además es importante la adopción de hábitos de vida saludables para la prevención de eventos cardiovasculares. Según el doctor Checa, “una disminución del 10% del peso corporal en mujeres obesas, disminuye un 50% el riesgo de eventos cardiovasculares”.

Según el profesor Ferrer, “la menopausia y el envejecimiento llevan asociados una serie de factores de riesgo cardiovascular, como la hipertensión arterial, la hipercolesterolemia, la obesidad y la diabetes tipo 2, que, a su vez, provocan un aumento del riesgo de enfermedad cardiovascular”.

Alrededor del 50% de las mujeres postmenopáusicas padecen osteoporosis, “la relevancia de la repercusión individual, social y económica de la osteoporosis postmenopáusica crea la necesidad de revisar las incidencias del diagnóstico y tratamiento de la osteoporosis y de analizar, asimismo, el valor de los nuevos tratamientos farmacológicos, tanto para su tratamiento como para su prevención, fundamental en las nuevas estrategias terapéuticas con las que contamos hoy día”, afirma el profesor Ferrer.

Por tanto la importancia de la detección precoz de la enfermedad es fundamental para identificar y prevenir los riesgos futuros de la osteoporosis.

Disfunción sexual

En la actualidad, con la llegada de la menopausia, la mujer se preocupa también por su salud estética y su salud sexual, que suponen una parte muy importante de su calidad de vida en esta nueva etapa.

“Cada vez es más frecuente que, con la llegada de la menopausia, las mujeres nos consulten sobre problemas o dificultades sexuales que les producen malestar y angustia en detrimento de su calidad de vida”, señala el doctor Checa. Así, el 58% de las mujeres entre 45 y 55 años consultan sus problemas sexuales al ginecólogo.


 Fecha de edición del texto: 18 de noviembre de 2006

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