Restauran un tramo de la calzada romana Vía Antonina del siglo III a su paso por Galapagar
La calzada romana Vía Antonina fue construida por los romanos entre los años 213 y 217, y su trazado, que unía Segovia con Titulcia, procede del Puerto de la Fuenfría, en el municipio serrano de Cercedilla. Ahora ha sido restaurado el tramo de Galapagar, quedando incluida en el Plan de Yacimientos Visitables de la Comunidad de Madrid
Debido a que la calzada romana Vía Antonina es uno de los escasos testimonios de calzada romana ubicado en la región madrileña, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, en colaboración con la Consejería de Cultura, decidió recuperar no solo el trazado, sino también una de las alcantarillas ubicada en la vía romana, así como el puente del Toril, construido en el siglo XVIII.
Vía pecuaria conocida como Cordel de Suertes Nuevas
Este tramo de la calzada romana, de 200 metros de longitud y ocho metros de ancho, se encuentra ubicado en una vía pecuaria conocida como Cordel de Suertes Nuevas, junto a la carretera de Galapagar a Collado-Villalba, en el entorno del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama.
Se trata de un tramo de la denominada Vía Antonina, antigua calzada romana que unía Mérida y Zaragoza (Caesaraugusta), pasando por Alcalá de Henares (Complutum).
Una obra de ingeniería y limpieza de los arqueólogos
El primer paso que se llevó a cabo fue la creación de una canalización para drenar el agua que se acumulaba en la calzada en las épocas de lluvia, según explicó hoy el director general de Medio Natural, Miguel Allué, que visitó las obras junto al director general de Patrimonio Histórico, José Luis Martínez-Almeida, y la alcaldesa de Galapagar, Carmen Toledano.
Una vez realizada esta obra de ingeniería, el grupo de arqueólogos de la Comunidad de Madrid que ha trabajado en esta obra, procedió a la limpieza y recuperación de las grandes losas que formaban la calzada, y que en muchos casos habían sido robadas y desplazadas a otro lugar.
Además, se ha procedido a la limpieza tanto del alcantarillado como del puente del Toril, en cuya superficie también ha quedado consolidada la calzada del siglo XVIII.
Restos arqueológicos y técnicas de construcción de los romanos
La Comunidad ha colocado paneles explicativos que contienen información sobre el origen y la ruta de estos restos arqueológicos, así como las técnicas de construcción de los romanos. Las obras de recuperación han supuesto 15 meses de trabajo y una inversión de 18.000 euros.
Una vez finalizadas las obras, la calzada romana de Galapagar ha quedado incluida en el Plan de Yacimientos Visitables de la Comunidad de Madrid.
Fecha de edición del texto: 20 de enero de 2008