La felicidad favorece la salud y la tensión es perjudicial, puede crear tumores

Un estado positivo es la mejor fortaleza para combatir cualquier agresión externa. Cuando nos invaden las emociones negativas, el cortisol (la hormona del estrés) aumenta y actúa como un inmunosupresor. Si hay una insatisfacción crónica prolongada, se pueden desarrollar procesos tumorales, lo cual está relacionado con un sistema inmune alterado.