Descubren una cueva con restos de rinocerontes del Pleistoceno en Pinilla del Valle
La cueva con restos rinocerontes del Pleistoceno que se ha descubierto en Pinilla del Valle es el yacimiento más importante de la región, y el único en el que constan restos de homínidos anteriores a nuestra especie. Cerca de cien arqueólogos, paleontólogos y geólogos trabajan para profundizar en la economía del Homo neanderthalensis, y han descubierto restos de una liebre silbadora, que hoy solo vive en el Himalaya y en las Rocosas.
Los yacimientos arqueológicos y paleontológicos de Pinilla del Valle se localizan en la margen derecha del río Lozoya, junto al embalse de Lozoya. El primer yacimiento, denominado del Camino, se descubrió en 1979 en el talud dejado por las obras del Canal de Isabel II para hacer un camino de servicio a la presa.
Entre 1980 y 1989 se hicieron varias campañas de excavación a cargo del Departamento de Paleontología de la Universidad Complutense que descubrieron una gran cantidad de restos faunísticos, que atribuyeron al Pleistoceno Medio, con una cronología de unos 200.000 años de antigüedad.
Los investigadores iniciales consideraron que el yacimiento era un antiguo abrigo con una ocupación de homínidos, mientras que otros consideraron que el yacimiento era un cubil de hienas.
Dadas las discrepancias, la Comunidad de Madrid decidió exigir la creación de un equipo interdisciplinar, algo que sólo se produjo a partir de 2002, fecha en la que desde el Museo Arqueológico Regional se conforma un equipo compuesto por arqueólogos, geólogos y paleontólogos, en buena medida componentes del Equipo Investigador de Atapuerca.
Campaña de investigación, dirigida por Juan Luis Arsuaga
El vicepresidente, consejero de Cultura y Deporte y portavoz del Gobierno regional, Ignacio González, ha visitado los yacimientos arqueológicos del Calvero de la Higuera, en el Valle Alto del Lozoya, donde se lleva a cabo la VIII campaña de investigación que la Comunidad de Madrid inició en el año 2002 a través del Museo Arqueológico Regional.
El proyecto de investigación está dirigido por el catedrático de Paleontología y co-director del yacimiento de Atapuerca, Juan Luis Arsuaga; el arqueólogo y director del Museo Arqueológico Regional, Enrique Baquedano; y el catedrático de Geomorfología y asesor del Centro Nacional de Investigación de la Evolución Humana, Alfredo Pérez- González. Estos yacimientos -declarados Bien de Interés Cultural, en la categoría de Zona Arqueológica y Paleontológica- son los únicos en la Comunidad de Madrid donde se han encontrado restos fósiles de homínidos anteriores a nuestra especie.
Un nuevo yacimiento: la Cueva Descubierta
En cuanto a los resultados científicos de la presente campaña, se ha presentado el descubrimiento de un nuevo yacimiento, bautizado como “Cueva Des-Cubierta”, que contiene restos de fauna y de industria lítica aunque, por el momento, no se pueda atribuir cultural ni cronológicamente a ningún periodo concreto.
Aun así, sí se tiene constancia de que pertenece al Pleistoceno por la presencia de Stephanorhinus hemitoechus, el rinoceronte de estepa y nariz tabicada propio de este periodo.
Pika o liebre silbadora, un mamífero que aparece por primera vez en la península
Asimismo, se ha descubierto en el Nivel 3 de la Cueva de la Buena Pinta – donde aparecieron en 2007 dos molares de neandertal- un ejemplar de ochotona, comúnmente conocida como pika o liebre silbadora, un pequeño mamífero que por primera vez aparece en la Península Ibérica y que indica la presencia de un clima frío en la zona, con una cronología de 63.000 años.
Este animal vive en la actualidad en las estepas asiáticas y en zonas montañosas como el Himalaya o las Montañas Rocosas, pero no se encuentra en Europa. Sin embargo, durante el Pleistoceno ocupó zonas más meridionales y occidentales, estando presente en yacimientos franceses e ingleses, aunque nunca hasta ahora se había encontrado en la Península Ibérica.
La Cueva del Camino
En la Cueva del Camino se está finalizando la excavación, aunque a un ritmo muy lento para no perder información de cara a la monografía que se está preparando sobre este yacimiento. Se está terminando de excavar el Nivel 5 y la zona del cono vertical, con 90.000 años de antigüedad, donde continúan apareciendo muchos restos de la actividad de las hienas.
El Abrigo de Navalmaíllo
En el Abrigo de Navalmaíllo, por su parte, se ha continuado trabajando en el Nivel F, con 77.000 años de antigüedad, que continúa ofreciendo hogares y piezas diagnósticas de la cultura musteriense, propia de los neandertales.
Con los resultados obtenidos durante las ocho campañas de excavaciones, se está preparando la publicación de tres artículos en la revista Zona Arqueológica, que edita el Museo Arqueológico Regional: uno sobre la geología del Calvero, otro sobre el proceso de acumulación de restos fósiles en la Cueva del Camino y el último sobre las diferencias estratégicas de ocupación y comportamiento de hiénidos y Homo neanderthalensis.
Sistema inalámbrico de toma de datos arqueológicos
Como en campañas anteriores, se está trabajando con un innovador sistema inalámbrico de toma de datos arqueológicos con el fin de registrar con la mayor precisión posible los restos que se descubren durante los trabajos de excavación. Además, se trabaja en la adecuación del programa que permita la incorporación directa de registros a la base de datos que se usa en los yacimientos de Pinilla del Valle.
Solamente en la Cueva del Camino se continúan registrando los datos de forma manual. Sin embargo, tanto en el Abrigo de Navalmaíllo como en la Cueva de la Buena Pinta y en la Cueva Des-Cubierta se registran las coordenadas (X, Y, Z) mediante el uso de una estación total y todos los datos referentes a año, cuadro, nivel, material, orientación, pendiente, medidas y observaciones se incluyen en una PDA.
Todos estos datos, vía bluetooth, son enviados a un ordenador central y pasan a formar parte de los inventarios generales de la excavación.
Los sedimentos son sometidos a un proceso de lavado con el fin de recuperar la microfauna
Como en años anteriores, todos los sedimentos son sometidos a un proceso de lavado con el fin de recuperar la microfauna contenida en los rellenos y los restos de talla no localizados durante la excavación. Los abundantes restos obtenidos mediante este proceso hacen necesario que un grupo de paleontólogos y arqueólogos “tríe” estos materiales con lupas binoculares en los meses posteriores a la campaña de excavación.
Esta octava campaña de excavaciones está financiada por la Vicepresidencia y Consejería de Cultura y Deporte de la Comunidad de Madrid y por la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura. Cuenta con el patrocinio de la empresa Mahou y del Canal Isabel II, y con la gestión económico-administrativa de la Fundación General de la Universidad de Alcalá. Además, tiene el respaldo y la colaboración de la de la Consejería de Empleo y Mujer; de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio; y del Ayuntamiento de Pinilla del Valle.
Jornada de Puertas Abiertas
Como cada año, los yacimientos arqueológicos de Pinilla del Valle abrieron sus puertas a vecinos y visitantes el 13 de septiembre, como broche final a la campaña de excavaciones. Mediante esta iniciativa, los asistentes conocieron no sólo la riqueza de estos yacimientos, sino también el trabajo cotidiano de los investigadores.
Durante la jornada de puertas abiertas se explicó al público tanto el proceso de excavación como la interpretación de los hallazgos, el tratamiento del material y la restauración de los restos encontrados. Los propios investigadores del proyecto científico fueron los encargados de dirigir estas explicaciones y de guiar a los visitantes por los yacimientos.
Fecha de edición del texto: 14 de septiembre de 2009